por RESISTENCIA 2.0
Una carismática niña de
La Trinidad (Estelí), atrapó la atención de los internautas este martes, al
contagiar con su alegría por su singular saludo a miembros de la Policía
Nacional, quienes llegaban a liberar de los tranques delincuenciales esta zona
del Norte del país.
Al ver pasar por la calle
a los policiales, la pequeña triniteña, acompañada de su aparente abuela o
mamá, grita desde el travesaño de la puerta de una casa: “Vienen los azules,
¡mis favoritos!, brinca y suelta una risa contagiosa de felicidad.
Mientras la señora, también
contagiada por la niña, les muestra su agradecimiento a los policías, mientras los ve pasar: ¡Adiós!, ¡adiós! ¡Gracias! ¡Adiós! ¡Somos libres! ¡Somos Libres!", grita con notoria emoción la pobladora esteliana.
La expresión de felicidad
y ver a los policías como sus héroes es comprensible de la llamada Niña Azul, cuando los pobladores han
pasado días y noches enteras secuestrados en sus casas, no teniendo la libertad
y derecho de salir a ninguna parte.
El vídeo ha inundado de
comentarios las redes sociales, tocando el corazón de los miles de
nicaragüenses que llevan más de dos meses secuestrados desde sus barrios y
comunidades, por la instalación de estos tranques delincuenciales.
Los tranques han sido
instalados por la oposición en decenas de municipios de Nicaragua, como una
medida represiva contra el pueblo trabajador, y como una acción contra el gobierno
en una intentona golpista.
Durante más de sesenta
días, las familias han denunciado ante los Mediadores del Diálogo Nacional (obispos
de la Conferencia Episcopal) y los relatores de la Comisión Interamericana de
Justicia (CIDH), las extorsiones, robo, violaciones a menores y terror que
ejercen los golpistas desde estos tranques o barricadas.
Recientemente la
Policía Nacional capturó a un miembro de la Mara Salvatrucha, que fue
contratado, junto a otros 30 terroristas del MS-13, por la derecha, para
sembrar zozobra desde los tranques.
La tarde del martes, representantes
del Grupo Regional de América Latina y el Caribe
(GRULAC) y embajadores de Centroamérica
también denunciaron, ante la Asamblea Nacional, el secuestro de más de 400 trabajadores
del transporte de carga comercial internacional, en el tranque de Jinotepe (Carazo).
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