por RESISTENCIA 2.0 -

MANAGUA- La empresa minera B2Gold, redujo sus pronósticos de producción de oro en dos minas de Nicaragua, como resultado de los controles y tranques que la oposición ha instalado en diferentes carreteras del país, como medida de presión contra el gobierno y una fallida intentona golpista.  

Sin embargo, la guía de producción general de la compañía permanece intacta entre 910,000 onzas y 950,000 onzas, y que planea compensar el déficit en Nicaragua con la producción de otras operaciones.

Con sede en Vancouver, B2 Gold es un productor de oro senior con cinco minas en operación y numerosos proyectos de exploración y desarrollo en varios países, incluidos Nicaragua, Filipinas, Namibia, Malí, Burkina Faso, Colombia y Finlandia.

Su lista de minas productoras incluye la mina Fekola en Malí, África occidental, la mina Masbate en Filipinas y la mina Otjikoto en Namibia. La compañía también tiene dos minas en Nicaragua: las minas La Libertad y El Limón.

La producción en La Libertad (Chontales) se ha reducido a 110,000-115,000 onzas de 115,000-120,000 onzas, debido a interrupciones en el suministro, por las continuas barricadas en el país que obligaron a procesar material de menor cantidad y calidad.

En la mina El Limón, para 2018 se ha reducido a 50,000-55,000 onzas de 55,000-60,000 onzas, debido a que la producción también fue interrumpida en junio por tranques ilegales en las carreteras.





 por RESISTENCIA 2.0

La Policía Nacional capturó al salvadoreño Oscar Antonio Rivas, alias El Diablo, miembro de la temida mara M18, y quien jefeaba una clica o célula terrorista para crear el caos y una cadena de asesinatos en Nicaragua.

El Diablo fue contratado por los golpistas de la derecha para organizar y dirigir un grupo de hasta 30 mareros que instalaban en Nicaragua tranques, sembrando el terror principalmente en ciudades como León, Chinandega, Managua, Carazo y Matagalpa.

Autoridades de la Dirección de Auxilio Judicial (DAJ) de la Policía Nacional, informaron que este capo está vinculado al narcotráfico, robos, secuestros, violaciones, tortura y asesinatos.

El famoso diablo fue detenido cuando pretendía cruzar de manera ilegal el territorio costarricense, por el sector conocido como Sapoá.

El detenido, quien fue contratado para ejercer acciones terroristas contra el gobierno de Nicaragua, operaba en conjunto con un traficante de cocaina, conocido como El Rasta.



Antecedentes:

A la edad de 17 años, el detenido Oscar Rivas (El Diablo) ingresa a la Mara18 con su hermano, Carlos David Martínez Carrillo (22) y Ricardo Arnulfo Martínez Carrillo; estas dos personas mueren en enfrentamientos en otra mara de ese país.

Participa como miembro de la Mara 18 en recolección de renta, extorsión en centros comerciales, negocios y transportes públicos en Coco clan y Colonia Valle Verde (San Salvador).

Participa en el asesinato de 7 miembros de la Mara Salvatrucha en cholotenango y la Colonia Valle Verde, lo que significó que fuera propuesto como jefe de una célula.

Participa además en diferentes enfrentamientos con la Policía Salvadoreña, y fue detenido en dos ocasiones por delitos de homicidio, extorsión y disturbios en ese país.


por RESISTENCIA 2.0

El fundador y director del Centro de Estudios de Economía y Política de México, y Columnista de la cadena internacional Telesur, doctor Miguel Ángel Ferrer, analiza que a más de dos meses que la violencia organizada estallara en Nicaragua, en forma de protestas antigubernamentales, el termómetro de la calle indica que el clima tenso generado por el plan desestabilizador, comenzó a descender.

“Al paso de los días es evidente que se está desinflando el golpe suave que pretendía derrocar al gobierno de Nicaragua”, explicó el analista y profesor de Economía Política, en el Diario El Sol de México.

El doctor Ferrer señala que durante semanas la sociedad nicaragüense fue expuesta a grupos de vándalos y pandilleros reclutados, especialmente para generar la apariencia de ingobernabilidad y caos social.

“Pero aun así el golpe blando no ha cuajado. Ahora en Nicaragua, como antes en Venezuela, Irán, Siria y China (en los años 80 del siglo pasado), es evidente el fracaso de la técnica del golpe suave. Tranques, guerra sicológica, propaganda negra, fake news, terrorismo urbano y gatilleros intelectuales se han mostrado insuficientes e inoperantes para inducir el colapso del gobierno cuando éste se mantiene firme”, argumentó.

El experto también describió que en situaciones como la que se vive en Nicaragua algunos medios de comunicación sirven para desinformar y lo mismo puede decirse de las modernas redes sociales. 

“Pero las noticias falsas no cambian la realidad y, a falta de golpes militares clásicos o de apoyo bélico extranjero directo, son inútiles para lograr el derrocamiento de un gobierno”, apuntó.




Acerca de Miguel Ángel Ferrer

Ciudad de México, 1948. Economista y profesor de Economía Política. Fundador y director del Centro de Estudios de Economía y Política. Columnista del diario El Sol de México, del mensuario Siminforma, del diario digital español Rebelión, del sitio web TeleSur, del diario digital Al Momento, de la revista digital Libertas, del diario digital feminista Affidamento, Mujer y Cultura y de la revista digital Fórum en Línea. Ha sido editor, editorialista y columnista en los principales diarios y revistas mexicanos: Excélsior, El Universal, El Financiero, Últimas Noticias, El Gráfico, La Afición, El Día, La Crisis, Impacto, Bucareli 8, Cambio, Gente en Acción, Petróleum (suplemento mensual del diario Reforma), Siempre, Rumbo de México, Orbe (suplemento catorcenal del diario La Jornada), Prensa Latina (Agencia Informativa Latinoamericana) y del diario en lengua inglesa The News. Igualmente ha sido comentarista en Radio 13, Radio Fórmula, Tele Fórmula, Radio ABC y en los canales 34 y 40 de TV. Epigramista y decimista, difunde sus trabajos en verso en diversos medios impresos y electrónicos.




por RESISTENCIA 2.0 -

Nos llegó un vídeo del guerrillero de la comunicación, compañero Ramón Rodríguez, ese gran cachorro aventado que se ha vuelto viral en las redes sociales por levantar la moral de los Sandinistas, ante la intentona golpista de la oposición.

El revolucionario norteño, está estrenando una simpática página en Facebook, donde en uno de sus primeros aportes sostiene un monólogo reflexivo sobre la situación actual, llamando al amor y no al odio.

“Seguimos haciendo la lucha contra estos vándalos. Esta gente nos quiere meter a la violencia, nos quieren meter al odio”, expresó.

Ramón explica que es fácil caer en el odio, pero la verdadera batalla de un revolucionario es cultivar el amor.

“Si usted odia, entra en una histeria colectiva, y ese es el plan que tienen ellos. Si nosotros somos violentos, le estamos haciendo el juego a estos vándalos, a este montón de golpistas”, dijo.

Comentó que  no hay que caer en la violencia, y contrario a ello “hay que armarse del fusil del amor, del fusil de la ternura”.

“Ármese de amor, ármese de paz, ármese de paciencia, de cariño; los revolucionarios somos amor.  Un revolucionario sin amor por su pueblo, es como un soldado desarmado”, sostuvo.

Criticó a Monseñor Rolando Álvarez, mediador de la Mesa de Diálogo Nacional, a quien llama “El Cabo”.  

“Cabo Álvarez, no vamos a entrar en su jueguito. Lo vi que andaba en el Vaticano, imagino que me le jalaron las orejitas”, manifestó.

El compañero Rodríguez, explicó que estos Obispos han convertido las iglesias en cuarteles, y los campanarios en guaridas de francotiradores.  

“Los padres creen que porque tienen una sotana, tienen inmunidad, y pueden hacer lo les venga en ganas, y no es así”, expresó.

El guerrillero digital, denunció que también “El Teniente Báez”, está llamando a una guerra, lo cual es considerado un delito, “y si el Comandante Daniel Ortega no lo ha metido preso, es porque este pueblo es ante todo católico”. 





por Misión Verdad -

La manera en que las fuerzas de desestabilización han venido manifestándose en Nicaragua durante los últimos meses, debe enmarcarse en una región donde la violencia armada y paracriminal representada en bandas como la Mara Salvatrucha (MS-13) y la Calle 18 (M18), que han mutado de bandas callejeras a desempeñarse en niveles medios del crimen organizado, sirven de peones en la defensa de la industria internacional del narcotráfico. Ganar el territorio nicaragüense, ajeno al control paramilitar de sus instituciones, a la causa del narcotráfico y sus derivados criminales, se convierte en parte de los móviles para presionar por el cambio de régimen en el país.

Origen transnacional de las pandillas centroamericanas

Las pandillas en Guatemala, Honduras y El Salvador, naciones ubicadas en lo que se conoce como el Triángulo del Norte, son el resultado de países alterados por el destino de repúblicas bananeras que Estados Unidos determinó en función de alimentar su estatus de superpotencia.

Durante los conflictos armados de los años 70 y 80, más de 1 millón de personas emigraron producto de las cruentas guerras en Centroamérica, donde Estados Unidos tuvo un papel clave en el financiamiento de grupos mercenarios; recordemos a los Contra, para evitar la llegada al poder, o la consolidación en el caso de Nicaragua, de gobiernos alternativos. Esa es la causa principal que determinaría el grueso de la historia contemporánea de Centroamérica, allí donde la violencia de los años 70 se une, en un mismo trayecto, en un mismo plan, con la terrible ola de violencia que actualmente azota a Nicaragua.

Volviendo a la emigración forzada. Los que tomaron como destino el norte del continente americano, obligados a la clandestinización, se formaron en las prácticas de crimen común, vandalismo y el narcotráfico como respuesta de sobrevivencia a la violencia cotidiana. En el año 1996 se implementó en Estados Unidos la deportación masiva de inmigrantes. Como consecuencia, 200 mil ciudadanos, la cuarta parte de ellos presos por estar relacionados a la cultura pandillera, fueron trasladados a Honduras, Guatemala y El Salvador.

Allí comienza la transnacionalización de las Maras, una de las formas sociales más famosas de un amplio espectro de criminalidad. Los grupos violentos absorvieron a las pandillas locales e importaron los códigos de un nivel de violencia criminal más organizado, con el aditivo de un flujo de armas adquiridas ilegalmente en los estados fronterizos de Estados Unidos.

En ese contexto, se ubica el triunfo y desarrollo de la revolución sandinista, que enfrenta su propia condición, o fatalidad, según se vea, a nivel geopolítico: estar en el corredor de tráfico de drogas que viaja desde los Andes con destino a los grandes mercados de las urbes norteamericanas. El enfoque ideológico con que Nicaragua aborda la penetración de bandas criminales es contrastable con las soluciones presionadas por la Agencia de Control de Drogas (DEA) y aplicadas en los países del Triángulo del Norte, diezmado por el MS-13 y el M18.

El Estado nicaragüense ha confrontado a pandillas locales menos violentas, a través de una articulación entre las fuerzas de seguridad nacional y la ciudadanía, conformando grupos de vigilancia comunitaria y logrando la identificación y desmovilización temprana de agentes del caos en barrios y localidades, con el fin de desescalar la violencia en el país. El resultado es tan evidente que ni organizaciones mundiales han podido negar la excepcionalidad con sus vecinos fronterizos: Nicaragua es conocido como el país más seguro del planeta.

Sin embargo, el fortalecimiento de las Maras en las débiles estructuras estatales del Triángulo del Norte, que se profesionalizaron, expandiendo su participación a actividades de extorsión, crimen organizado y el tráfico de drogas y personas, ha intensificado en el país la importación de células ligadas al pandillaje regional. Lugareños de Soto y San Lucas, poblaciones fronterizas con Honduras, sufren la intervención de estas bandas en su cotidianidad.

El arresto en 2017 de Sergio Umaña, presunto líder del MS-13, acusado de lavado de dinero y tráfico internacional de drogas, es el antecedente más destacado de una serie de detenciones en departamentos fronterizos de Nicaragua que confirman la adquisición de propiedades y recursos logísticos, así como las intensiones de establecer células de la organización en ese país.

Torturas, incendios y asesinatos: emulación de células paramilitares

Ahora, con el surgimiento de las manifestaciones aparentemente pacíficas en abril de 2018, utilizando el modelo de revolución de color como línea de acción para forzar un cambio de régimen, se fija el enlace de los operadores intelectuales con grupos paramilitares que escalen el conflicto a un nivel mayor de violencia política. Mientras que toman y aseguran territorios valiéndose del caos, la campaña mediática inicial de cubrir con el manto cívico a los grupos violentos blanquea a los involucrados en los hechos y se los adjudican al gobierno de Daniel Ortega.

En Venezuela, por ejemplo, el plan de golpe de color se gestionó con el apoyo del paramilitarismo colombiano, sobre todo en los puntos candentes de la guarimba en los estados fronterizos como Táchira y Zulia. En Nicaragua, son las pandillas y Maras constituidas en los países vecinos las que acuden al llamado de los intereses transnacionales. Justamente es su forma de operar, la que sugiere su autoría en el rastro de horror de las más de 170 víctimas fatales que ha saldado la guerra irregular en curso.

Las similitudes en las formas de actuar de las agrupaciones criminales en el desarrollo del conflicto nicaragüense y las células pandilleras en regiones fronterizas, se observan en el uso de asesinatos selectivos, la extorsión, saqueos de negocios, control de las vías de comunicación y extorsión a la ciudadanía.

El modus operandi que los indentifica.

Las denuncias hechas desde la cuenta de Twitter de la periodista Madelein García, son testimonios de las formas de tortura que grupos violentos utilizan para inflingir daño en la población.

Secuestrar y amordazar a las víctimas para golpearlas, amenazarlas de muerte y grabar las acciones que luego difunden en redes sociales, evocan las tácticas de terror que bandas paramilitares aplican en otros países. A finales del año pasado, miembros del MS-13 grabaron y luego publicaron en redes sociales la tortura y posterior asesinato de una menor de edad, un caso que no sólo impactó a la opinión pública sino que sirvió de propaganda para que el MS-13 se proyectara por encima de la capacidad policial de la autoridades salvadoreñas.

En distintos departamentos, que sufren el acoso de estos agentes ajenos a la comunidad, han delatado a estos grupos que, con la indulgencia de representantes de la oposición política, organismos no gubernamentales y la Iglesia católica, toman control de las vías de comunicación, imponen un estado de sitio, saquean negocios pequeños y extorsionan a los habitantes.

En León, departamento noroccidental de Nicaragua, ha registrado presencia de grupos encapuchados y armados, que aparecen en las protestas convocadas y abren fuego contra los manifestantes.

La imposición de los paros nacionales como medida de presión fue una estrategia empleada por las pandillas en 2015 contra el gobierno salvadoreño, que obligó a un paro de transporte, amenazando con matar a cualquiera que los desafiara. Asimismo ha funcionado en Nicaragua los llamados a trancar las calles y armar barricadas. En Madriz, el FSLN denuncia que actores extremistas y asociados a la dirigencia opositora han amenazado y extorsionado a la población con armas de fuego ante la negativa de sumarse a las barricadas para paralizar al país.

La intimidación, incorporando lenguaje de guerra en el entorno de los nicaragüenses, se ejecuta en la insercción en el territorio de estos ejércitos no regulares abocados al cambio del poder político.

Producir confusión entre atacantes y detonantes del conflicto también es parte de las tareas del paramilitarismo en la municipalidad de Yalaguina. Detuvieron a tres hombres armados que merodeaban un tranque realizado por opositores, uno de ellos de nacionalidad hondureña y que posiblemente está relacionado a la Mara en su país.

El asesinato selectivo de personas que alimenten la confrontación de los grupos opositores y el desprestigio de los procesos de diálogo convocados por el Estado nicaragüense se alternan con el mantenimiento del vandalismo interno que contenga, por medio de la instauración del terror, a la organización de las comunidades que han reestablecido la normalidad en sus localidades.

Es el caso de Mayasa, departamento del oeste que estuvo bajo asedio de las bandas armadas durante dos meses, y que hoy, liberadas de estas, relatan los vecinos del sitio.

Los focos de violencia, mayores en las regiones centrales y del norte del país, aumentaron vertiginosamente en el mes de junio, con un incremento en los sicariatos a miembros de los cuerpos de seguridad, dirigentes de movimientos políticos, instituciones públicas y organizaciones sociales, así como en los casos de incendios a hogares, escuelas y centros hospitalarios.

El cénit de los ataques se concentró en el este de la capital de Managua, cuando en un mismo día se registró el fallecimiento de 7 personas, entre ellas dos menores de edad, producto del incendio de una vivienda familiar causado en la madrugada del 16 de junio por grupos violentos, y el asesinato durante el día de Francisco Ramón Araúz Pineda y Antonio Fernández, que intentaban atravesar una barricada.

Araúz fue, además, incinerado por los terroristas mientras grababan la acción. Al 21 de junio, el Cuerpo de Bomberos Unificados, contabilizaba en 54 los incendios estructurales, 30 de ellos provocados por vándalos encapuchados.

Intereses bajo cuerda en el escenario internacional

Los medios privados, que conduce los eventos a la victimización de los operadores violentos, difundiendo acusaciones sin pruebas claras y aprovechándose de la fatalidad terrorista, apela a la ignorancia de sus espectadores internacionales para posicionar la narrativa de la violación de derechos humanos en el país por parte de las instituciones gubernamentales. Pero la mínima inmersión a la cadena de eventos que deterioraron a una región ejemplar en el área de seguridad nacional, hace imposible asociar al gobierno que dirigió las políticas para aislar la criminalización del país que Estados Unidos impuso en Centroamérica.

Ese estado de horror permanente, que en Nicaragua abre paréntesis a la normalidad que movimientos sociales sandinistas iniciaron en la década de los 90 en su territorio, es el azote diario de las naciones que la bordean, y que propagandistas de la democracia occidental omiten.

La violencia política de los 70 y 80 se transformó en la violencia criminal de las pandillas bajo el amparo o el desinterés de sectores corrompidos de los Estados. 52 asesinatos en un solo día fue la cifra más letal de El Salvador en 2015. 7 mil 172 homicidios fueron el saldo anual de 2012 en Honduras. Un día histórico para Guatemala, que tiene una tasa de 75 homicidios por cada 100 mil habitantes (el triple que el promedio anual de la región), es que pasen 24 horas sin que ocurra ningún asesinato. Transferir la configuración criminal de este triángulo, para contribuir al derrocamiento de Daniel Ortega, es cuestión de financiamiento a los vasallos adecuados.

Vuelven a la memoria Siria y Libia, remotas en distancia, pero cercanas en las intenciones del poder fáctico por desmantelar a los Estados de los países periféricos, un proyecto político que no conoce de fronteras y que se adapta a las características territoriales y culturales del sitio al que ataca. Las fichas, llámese Estado Islámico o Mara Salvatrucha, construidas en zonas balcanizadas, son funcionales a la caotización de territorios y tienen el potencial para fungir como actores no estatales en la pretenciones cada vez más urgentes, y menos eficaces, del orden mundial occidental por instaurar un estado de excepción global.

Justamente, con la deportación masiva de los años 90, el sincretismo con la violencia criminal en Estados Unidos, la mega plaza del narcotráfico que se consolidaba en Los Ángeles con su respectivo cordón umbilical en Centroamérica y la transformación del centroamericano precarizado por el conflicto armado en un obrero de la industria del narcotráfico, se sentaron los pilares para descabezar, en el momento indicado, a los países que aún se resisten a ser una maquila o que coloquen diques a las rutas del narcotráfico del cual depende Estados Unidos, tanto su gobierno como su enferma y destruida población.


por RESISTENCIA 2.0 -

La Agencia de Noticias Internacional EFE, circuló masivamente un reporte con información claramente distorsionada, donde retoma como fuente principal una falsa cuenta de Twitter del Ministro de Asuntos Exteriores de la República de Nicaragua, Denis Moncada Colindres. 

La agencia española, que opera en 180 ciudades de 110 países, difundió un falso tuit del canciller nicaragüense, en su reporte escrito: “EE. UU reclama a Nicaragua vehículos donados a Policías...”, el cual fue publicado por diversos medios noticiosos a nivel mundial. 

La nota periodística (clasificada por su grado de manipulación como spam político) hace referencia a la solicitud que hiciera la Embajadora de Estados Unidos, Laura Dogu, a la Policía Nacional en cuanto a la devolución de vehículos donados por su país, en términos de cooperación.

Dogu señaló a la Policía de usar dichos vehículos para reprimir a protestantes; sin embargo, a través de un comunicado la institución policial desmintió a la diplomática, aclarando que los medios de transporte eran utilizados para combatir el narcotráfico y el crimen organizado.

La Agencia Efe, en clara guerra contra el Gobierno de Nicaragua y notoriamente parcializada con grupos de oposición que pretenden ejecutar un golpe de Estado en este país, circuló un tuit del Canciller Moncada, publicado en una cuenta falsa de la plataforma Twitter.

Expertos locales en Informática y Telecomunicaciones, advirtieron en días pasados sobre la cuenta fantasma @DenisCanciller, atribuida al ministro nicaragüense, creada y administrada por fackers del Movimiento Estudiantil 19 de Abril (M-19) con fines políticos.

Los informáticos descartaron que la falsa cuenta del canciller nicaragüense, la cual ya fue eliminada en horas de esta madrugada, se tratara de un bots (o usuario robot), partiendo que la misma no alcanzaba ni los quinientos seguidores y no generaba contenido automático, ni sincronizado.   


“Según dijo el ministro nicaragüense de Exteriores, Denis Moncada, en sus redes sociales, la Policía de Nicaragua comenzó a devolver el martes los vehículos donados por el Gobierno de Estados Unidos.

"Hoy se han devuelto los vehículos a la Embajada de EE.UU. y ahora exigimos el pago de los 16.000 millones de dólares para reparo de la guerra que financiaron en territorio nicaragüense con la Contra", publicó Moncada en su cuenta oficial de Twitter. (DIFUNDIÓ EFE, EN SU NOTA)

El fake tuit, hace alusión a la auténtica y real fecha histórica cuando la Corte Internacional de Justicia (en La Haya), hace 32 años, ordenó a Estados Unidos el pago de 17 mil millones de dólares, en sanción por haber financiado la guerra contrarrevolucionaria en Nicaragua, cobrando más de 38 mil víctimas fatales.


Uno de los tantos medios extranjeros que publicaron la falsa información de EFE: 




por RESISTENCIA 2.0 -

La incapacidad de la oposición para ganar limpiamente las elecciones en Nicaragua los llevó a apostar por el plan más macabro: el de incubar muertes y con ello encender una revuelta golpista.

En el camino aprovecharon para destruir, sembrar odio, terror y manipular la mente de los nicaragüenses. 

Dos meses después de iniciada la revuelta el pasado 18 de abril, la oposición tiene claro que fabricar muertes es la mejor empresa que han emprendido para secuestrar el poder que el pueblo recuperó en el 2007.

Las organizaciones aliadas de los golpistas se apresuran a llevar las cuentas de cada muerte y por ese trabajo reciben jugosas sumas de dinero. 

Los medios de comunicación, que desde siempre han vivido “en guerra” contra el Gobierno, no tardan en engrosar sus informaciones con mentiras y manipulaciones. Saben que el papel lo aguanta todo y que la muerte genera repudio.

Mientras más sangre exhiban sus ediciones y señalen un culpable, la violencia despuntará al día siguiente y la indignación en contra del Gobierno también. 

De esta manera, los organizadores de la revuelta golpista (M19 y MRS) tienen todo bajo control. 

En la primera línea están los delincuentes que les hacen el trabajo sucio: matar, intimidar. Hacen lo que sea para sembrar terror.

En el camino encontraron a tres importantes aliados. La Iglesia Católica, en la voz de obispos que juegan un activo rol político a favor de grupos de ultraderecha; a los empresarios criollos desesperados para sacarse a un gobierno progresista de encima; y a las agencias de derechos humanos, como la CIDH y la ACNUDH.

Hasta el momento la CIDH ha jugado el papel más triste y lamentable en lo que lleva de existencia. Condenando a priori, y siendo parte del complot, este organismo lejos de ser un ente imparcial se sumó al plan de la revuelta, legitimando las denuncias, sin investigar y participando de montajes que han hecho los golpistas. Las muertes, como sabemos, son su principal argumento.

Mientras a nivel político el pequeño grupo espera con ansias la renuncia del Presidente Daniel, en la calle la historia es otra.

Como dice un dicho popular, la mentira tiene patas cortas. Y de verdad que así es.

De las masivas marchas opositoras, apenas unos cuantos han quedado en la calle ensuciando el nombre de la patria; otros siguen en los tranques, donde reside el poder del golpe, ya debilitado.

Los focos de violencia, que un día estuvieron encendidos se han ido apagando, pero no por una estrategia del gobierno, sino porque la población así lo ha decidido.

A pesar de todo, de las muertes, la violencia y la destrucción, a los golpistas habrá que recordarles que el drama del miedo tiene un riesgo para el que lo practica: que, de tanto repetirlo, la gente no se lo crea.
 

Ante el proceder de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, que analizó parcialmente la situación de Nicaragua, el canciller de ese estado centroamericano, Denis Moncada Colindres, intervino el viernes último en la sesión extraordinaria del Consejo Permanente de la OEA para defender los principios de su nación.

Para explicar su postura comenzó relatando que el informe analiza las protestas sociales ocurridas el 18 de abril, en las cuales –aclara el Canciller– no resultó ninguna persona fallecida. «Sin embargo, los medios de comunicación, manipulando la información, publicaron una noticia falsa sobre el fallecimiento de un estudiante universitario en la Universidad Centroamericana (UCA), el cual nunca existió», dijo. Esa fue, sin embargo, la punta de lanza que «sirvió como detonante de los hechos acaecidos a partir del 19 de abril», sostuvo.

Moncada considera que detrás de estas acciones pululan grupos interesados en la desestabilización y ruptura del orden constitucional de su país, ajenos a la reivindicación social: dieron lugar a partir de ese día a una asonada, que devino en estragos, incendios, saqueos y motín.

En consecuencia, el diplomático declaró que se trata de un plan preconcebido que se afinca en la participación de pandilleros armados y termina provocando la muerte a sus coterráneos, incluidos policías, blanco al que dirigen sus armas de fuego los mencionados pandilleros.

Como si no bastara –denuncia Moncada– ese patrón delictivo se replicó en algunas de las principales ciudades del país, «lo que reveló la existencia de una planificación y organización previamente diseñada y financiada».

En ese sentido, Moncada enfatizó en que no es política de Estado, por parte del Gobierno de Nicaragua, la represión de protestas sociales y menos el uso excesivo y arbitrario de fuerzas por parte de la Policía Nacional; basta citar las múltiples marchas que han ocurrido en el país, en las que no se reportó ningún fallecido.

«Rechazamos las recurrentes, ligeras e infundadas afirmaciones de condenas sobre denuncias hechas en contra del Estado de Nicaragua y, en particular, en contra de la Policía Nacional a las que alude el informe», resaltó.

«El informe presentado por la CIDH, hasta el 6 de junio sobre fallecidos atribuidos al Estado, no está ajustado a la realidad, porque se reportó hasta esa fecha 98 fallecidos vinculados a esa coyuntura dentro de los cuales hay también policías, ciudadanos sandinistas y población en general. No todos los fallecidos son atribuibles a la situación que se estaba viviendo en ese momento, ya que algunos de ellos fueron por causas ajenas a los sucesos que están siendo investigados por las autoridades competentes», reivindicó.

Por otra parte, insistió Moncada en que los 143 muertos señalados en el informe no han sido debidamente investigados y verificados por la CIDH.

«En este informe se omiten deliberadamente todos los ataques armados, asedios, hostigamientos y secuestros de los que han sido y siguen siendo objeto las delegaciones de la Policía Nacional, las que por decisión del Presidente de la República y a solicitud de la Mesa del Diálogo, fueron reconcentradas en sus unidades, como ocurrió en Matagalpa, Jinotepe, Masaya, León, Jinotega, Diriamba, Sébaco, Nagarote y Nindirí, entre otros; y la masacre y secuestros de policías en Mulukukú y El Jicaral. La concentración de la Policía en sus unidades ha generado un libre accionar de los delincuentes, trayendo como consecuencia el incremento de la actividad delictiva», denunció.

NICARAGUA BAJO EL ASEDIO ENEMIGO

Como un punto fundamental de su discurso contra el injerencismo desmedido de una organización disfuncional y proyanqui, el Canciller nicaragüense destacó que la CIDH hace caso omiso a los derechos humanos y constitucionales, tales como el derecho al trabajo, a la libre circulación de las personas, a recibir atención en salud, así como al derecho a la alimentación y educación. Lamentó también cómo omiten, a su conveniencia, la destrucción, incendio y saqueo de oficinas de instituciones públicas, edificios municipales, de unidades de policía, de instalaciones del Frente Sandinista de Liberación Nacional y de viviendas de dirigentes del FSLN y funcionarios públicos; además de la destrucción y saqueo de ambulancias, centros de salud, clínicas móviles, casas maternas, escuelas, equipos y maquinaria de las alcaldías. Todo ello perpetrado por grupos vandálicos.

No es de extrañar que la mayoría de las fuentes de información que se citan en el informe de la CIDH provienen de agencias y medios de comunicación adversos al Gobierno nicaragüense –como advierte el Canciller–, cuya generalidad de noticias son falsas y manipuladas.

En ese mismo desequilibrio, la CIDH desestima las versiones de las familias afectadas y los bienes destruidos, «quitándole valor de objetividad a su informe, ya que no está basado en investigaciones de fondo y por consiguiente no puede tener conclusiones definitivas, al no incorporar las denuncias de ciudadanos víctimas de atropellos de los grupos desestabilizadores», declaró.

Agregó que «el Estado de Nicaragua rechaza contundentemente todas las irregularidades y denegación de atención médica que la CIDH refleja en su informe. El Ministerio de Salud mostró evidencia a los miembros de la CIDH, de los pacientes que fueron y están siendo atendidos en las diferentes unidades de salud y en seguimiento en la consulta externa de los hospitales; durante este periodo también se han recibido pacientes de hospitales privados, a los cuales se les ha dado continuidad de la atención. Reafirmamos que nunca se ha negado la atención a los  pacientes. El 6 de junio, el Estado le ofreció y entregó a la CIDH la información detallada de los 1 337 lesionados, con información de la unidad de salud en que fueron atendidos cada uno, de la situación en que llegaron y la atención que se brindó, la cual es omitida deliberadamente por la CIDH, pronunciándose la mala calidad en algunos casos sin haber realizado una auditoría médica que evalúe el proceso de atención.

«El Estado de Nicaragua rechaza contundentemente las supuestas irregularidades en el inicio de las investigaciones respecto de los fallecidos y lesionados ocurridos en ese contexto, el Ministerio Público en todos los casos que ha judicializado, lo ha hecho cumpliendo con los estándares internacionales y agotando todas las posibles líneas de investigación; las acusaciones se han realizado con abundantes elementos de convicción, con pruebas periciales, testificales y documentales, entre otros», detalló.

«Rechazamos la supuesta falta de confianza en presentar denuncias, ya que el Ministerio Público ha recibido más de 60 denuncias por familiares de personas fallecidas, así como abundantes denuncias por daños a la propiedad pública y privada que demuestran la confianza de la población en la institución. En la visita de la CIDH, el Ministerio Público hizo saber de esta información y sobre las diligencias investigativas, las cuales en este informe han sido ignoradas».

Cuestionó Moncada que los daños sufridos por funcionarios y ciudadanos identificados como sandinistas, no se reflejan en el informe de la CIDH; así como los incendios provocados en Masaya, León y Managua con personas calcinadas y otras secuestradas, que constituyen verdaderos actos terroristas. Asimismo –valoró–, la estigmatización de los funcionarios públicos y sus familias a través de las redes sociales, constituye un verdadero linchamiento mediático, violatorio de los derechos humanos, a los que la CIDH no hizo ninguna referencia en el informe.

En el informe de la CIDH se condena a priori al Estado de Nicaragua por los fallecidos del 30 de mayo, entre los cuales hubo militantes sandinistas, y también se concluye precipitadamente en culpar a la Policía Nacional del incendio y muerte el 16 de junio de la familia Velázquez Pavón en el barrio Carlos Marx, en Managua, la que había sido amenazada el 14 de junio por elementos opositores por no participar en el paro nacional.

En base a todo lo anterior, el Canciller rechazó las conclusiones del informe presentado por la CIDH, el cual consideró que falta totalmente a la verdad, ofendiendo la dignidad de los nicaragüenses.

Por último, Moncada recordó que Nicaragua en las dos ocasiones que ha estado en el Consejo de los Derechos Humanos de Ginebra ha salido con éxito del Examen Periódico Universal. «No es política del Estado de Nicaragua violar los derechos humanos, más bien constituyen un eje fundamental de nuestra Constitución Política y de la actuación del Gobierno de Reconciliación y Unidad Nacional. Basta señalar que Nicaragua es el país más seguro de Centroamérica y el segundo de América Latina». Resaltó además que recientemente invitaron al Alto Comisionado de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, la Unión Europea, la Secretaría General de la OEA y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos para que visiten Nicaragua y acompañen  las labores de la Comisión de Verificación y Seguridad creada el 16 de junio pasado en la Mesa de Diálogo Nacional, contando con la mediación de la Conferencia Episcopal.

Con la Secretaría de la Organización de Estados Americanos –detalló–, hemos venido trabajando de manera fluida desde antes que estos hechos de violencia tuvieran lugar. «En ese sentido se estableció una Misión de Acompañamiento Electoral a las elecciones municipales realizadas en noviembre del 2017, cuyo informe fue presentado en diciembre del año pasado en este Consejo Permanente».

Por todo lo descrito y la vocación humanista del Estado nicaragüense, en nombre de su país, Moncada solicitó a la CIDH que incluya en su informe todas las observaciones que el Estado ha expresado en las consideraciones, toda vez que se trata de un Estado que «continúa y continuará trabajando por la paz, la estabilidad, para que prevalezcan la verdad y la justicia, el orden social, la seguridad, los Derechos Humanos de todos los nicaragüenses y personas que se encuentren en nuestro territorio».

Publicado en: Pensando Américas

por RESISTENCIA 2.0 -

El reconocido escritor y bloguero norteamericano, Max Blumenthal, publicó recientemente un amplio reportaje donde destapa el plan de financiamiento del organismo National Endowment for Democracy (NED), para ejecutar el golpe de Estado en Nicaragua, a través del Movimiento Estudiantil 19 de Abril (M-19), el Instituto de Estudios Estratégicos y Políticas Públicas ( IEEPP ) y la llamada Alianza Cívica por la Democracia.


A continuación el reportaje de Bluementhal: 

Mientras que algunos medios de comunicación corporativos han retratado al violento movimiento de protesta que atrapa a Nicaragua como una corriente progresista de base, los propios estudiantes del país han dejado ver todo lo contrario.

A principios de junio, un reducido grupo de activistas opositores de Nicaragua fueron a reunirse a Washington, DC, con la cabeza del grupo derechista de defensa del Estado estadounidense Freedom House. El grupo opositor, conocido como M19, estaba allí para suplicar a Donald Trump y otros funcionarios de derecha del gobierno de los Estados Unidos que los ayudaran en su lucha contra el presidente nicaragüense Daniel Ortega.

En una gira a la capital de EE. UU.,  los dirigentes del M19 posaron para las fotos con algunos de los neoconservadores más notorios del Congreso de los EE. UU .: los senadores Ted Cruz y Marco Rubio y la representante Ileana Ros-Lehtinen. Los M19 también fueron guiados a las reuniones con altos funcionarios del Departamento de Estado y la organización de poder bélico USAID. Allí, se les aseguró que contarían con el apoyo rotundo de Washington.

Un mes antes de las reuniones del M19 con legisladores ultraconservadores en Washington, una publicación financiada por el brazo de cambio de régimen del gobierno de Estados Unidos, National Endowment for Democracy (NED), afirmó sin rodeos que las organizaciones respaldadas por NED han pasado años y millones de dólares "sentando las bases para la insurrección" en Nicaragua.

Este artículo que se jacta abiertamente de la intromisión de los Estados Unidos se publicó en el sitio web de noticias enfocado en América Latina, Global Americans, y fue escrito por el académico estadounidense Benjamin Waddell , director académico de la Escuela de Capacitación Internacional en Nicaragua. Después de la publicación de este artículo, Global Americans reemplazó el término "insurrección" con la palabra más inocua "cambio". Sin embargo, el título original aún se puede ver en la URL del artículo.

A pesar de la alteración cosmética, el artículo de Waddell ofrece una evaluación notablemente sincera del impacto de las inversiones sostenidas de National Endowment for Democracy en la sociedad civil nicaragüense. Las conclusiones del autor se hicieron eco inadvertidamente de las del presidente nicaragüense Daniel Ortega y sus partidarios, que han enmarcado las protestas como una trama cuidadosamente montada respaldada hasta los dientes por Washington.

"La prensa internacional describió la rápida escalada de disturbios civiles en Nicaragua como una explosión espontánea de descontento colectivo, desencadenada por los cambios del gobierno al sistema de seguridad social". Waddell escribió que "cada vez es más claro que el apoyo de los Estados Unidos ha ayudado a desempeñar un papel en el fomento de los levantamientos actuales".

En otro pasaje llamativo, concluyó Waddell, "la participación actual de la NED en nutrir a los grupos de la sociedad civil en Nicaragua arroja luz sobre el poder del financiamiento transnacional para influir en los resultados políticos en el siglo XXI".

Una historia de intromisión

El NED es un agente líder del poder blando de Estados Unidos que se ha metido en asuntos de otros países desde su fundación en el apogeo de la Guerra Fría en 1983. Su primer éxito tuvo lugar en Nicaragua, donde incubó trajes anti sandinistas como el diario La Prensa a través de un recorte, PRODEMCA, que también fue financiado encubiertamente por aliados de Oliver North.

En 1990, los sandinistas fueron derrotados en las urnas por la candidata derechista Violeta Chamorro, cuya familia era dueña de La Prensa. La victoria de Chamorro representó la culminación de casi $ 16 millones de dólares en subvenciones de NED a partidos políticos y medios de comunicación antisandinistas.

"Mucho de lo que hacemos hoy fue hecho encubiertamente hace 25 años por la CIA", comentó Allen Weinstein, fundador de la NED, en 1991.

En los años que siguieron, la NED y sus socios han ayudado a impulsar las elecciones para los candidatos neoliberales de derecha en Rusia y Mongolia en 1996;  fomentó un golpe que expulsó del poder al presidente democráticamente electo de Haití , Jean Bertrand Aristide; y dirigió a millones hacia el desmantelamiento del gobierno socialista de Venezuela, un esfuerzo continuo complementado por aplastamiento de las sanciones de Estados Unidos.

Las protestas que han estallado en Nicaragua han vuelto a enfocar la influencia del NED. Según Waddell, la NED ha gastado $ 4,1 millones en el país desde 2014, ayudando a que 54 grupos se conviertan en actores importantes en la escena política y "sentando las bases para la insurrección".

La red respaldada por Estados Unidos detrás de las protestas

Los disturbios que paralizaron a Nicaragua fueron provocados por el anuncio de reformas al sistema de seguridad social. El Fondo Monetario Internacional y un grupo paraguas de empresas locales insistieron en cambios que elevarían la edad de jubilación y privatizaron gradualmente las clínicas de salud, amenazando algunas de las ganancias más importantes de la revolución sandinista.

Cuando Ortega respondió con una propuesta que habría exigido una mayor contribución al sistema por parte de las empresas y los jubilados, con los dueños de negocios pagando la mayor parte, un sector del público explotó con indignación.

Las caras más visibles del movimiento anti Ortega no han sido los jubilados afectados por las reformas de la seguridad social, sino los estudiantes urbanos, políticamente no afiliados, que buscan una victoria total y han forjado una alianza con los opositores de la derecha.

Mientras tanto, hombres enmascarados con morteros y armas de fuego han formado la primera línea de los bloqueos viales que ya han drenado la economía de Nicaragua de unos $ 250 millones en ingresos. Hasta la fecha, unas 170 personas han sido asesinadas en el caos. A medida que aumenta el número de muertos en ambos lados, hablar de una nueva guerra civil parece una posibilidad más que remota.

Desde que comenzaron los disturbios, la NED tomó medidas para ocultar los nombres de los grupos que financia en Nicaragua con el argumento de que podrían enfrentar represalias del gobierno. Pero los principales receptores de respaldo de Washington ya eran bien conocidos en el país.

Hagamos Democracia , o Let's Make Democracy, es el mayor receptor de fondos NED, cosechando más de $ 525,000 en subvenciones desde 2014. El presidente del grupo, Luciano García, que supervisa una red de reporteros y activistas, ha declarado que Ortega ha convertido a Nicaragua en un "Estado fallido "y exigió su renuncia inmediata.

El Instituto de Estudios Estratégicos y Políticas Públicas ( IEEPP ) de Managua, cuyo presidente es Félix Maradiaga, recibió al menos $ 260,000 del NED desde 2014. Las subvenciones se destinaron para apoyar el trabajo del IEEPP en la capacitación de activistas para "fomentar el debate y generar información sobre seguridad y violencia. "El financiamiento también cubrió los esfuerzos para monitorear la "mayor presencia de Rusia y China en la región", una prioridad obvia para Washington.

Tan pronto como se iniciaron las violentas protestas contra Ortega, el director de IEEPP, Félix Mariadiaga, sacó a la luz su agenda. Ex líder global del Young World Forum educado en Yale y Harvard, fue elogiado por La Prensa por "sudar, sangrar y llorar junto a los jóvenes estudiantes que han encabezado las protestas en Nicaragua que continúan desde abril hasta finales de mayo".

Cuando La Prensa le preguntó si había alguna forma de salir de la violencia sin un cambio de régimen, Mariadaga fue franco: "No puedo imaginar una salida en este momento que no incluya una transición a la democracia sin Daniel Ortega".

"Nos hemos dado una imagen terrible"

Este junio, Mariadaga dirigió una delegación de oposición a Washington para denunciar el gobierno de Ortega ante la Asamblea General de la Organización de Estados Americanos. A él se unió Anibal Toruno, director de Radio Darío, otro receptor de apoyo desde hace mucho tiempo de NED ( PDF ) y uno de los centros clave de los medios anti Ortega en la ciudad nicaragüense de León.

Mientras Mariadaga estaba en Washington, la policía nicaragüense lo acusó de supervisar una red criminal organizada que ha asesinado a varias personas durante los violentos disturbios que se han apoderado del país. Mariadaga criticó las acusaciones como una "persecución política" y una "acusación ridícula", pero pospuso su regreso a Nicaragua. El Departamento de Estado de EE. UU. lo respaldó con una declaración de apoyo vehemente.

Al mismo tiempo, un grupo de manifestantes de las protestas contra Ortega estaban en Washington para presionar al gobierno de Trump en busca de ayuda para derrocar al líder de su país.

Entre los funcionarios de EE. UU. que recibieron a los estudiantes figura el director de USAID, Mark Green. "Necesitamos apoyar a aquellos que defienden las cosas en las que debemos creer", dijo Green sobre los estudiantes, en una entrevista con McClatchy .

Además de NED, USAID ha sido el promotor más activo del cambio de régimen contra los gobiernos de orientación socialista en América Latina. En Nicaragua, el presupuesto de USAID superó los $ 5.2 millones en 2018, con la mayoría de los fondos destinados a la capacitación de la sociedad civil y las organizaciones de medios.


El viaje de los estudiantes nicaragüenses a Washington fue financiado por Freedom House , un socio de NED financiado por el gobierno de Estados Unidos cuya agenda típicamente se alinea con el ala neoconservadora del establecimiento de la política exterior estadounidense.

Freedom House elaboró un itinerario para los estudiantes que culminó con una sesión fotográfica con algunos de los republicanos más belicosos de Washington: los senadores Ted Cruz y Marco Rubio, y la representante Ileana Ros-Lehtinen.

De regreso en Managua, otra prominente líder estudiantil, Harley Morales, se tambaleó con disgusto ante la aparición de sus compañeros en el Capitolio. "Fue terrible", dijo Morales al periódico El Faro. "Ellos (Cruz, Rubio y Ros-Lehtinen) son la derecha republicana extrema. Estamos muy descontentos con este viaje; fueron pagados por los Estados Unidos y se les impuso una agenda. Nos hemos dado una imagen terrible”.

Aunque esperaba "un plan de corrección de errores", Morales admitió que el control de poderosos intereses externos sobre los manifestantes estudiantiles era cada vez más estricto. "Todos los movimientos ahora tienen asesores", se lamentó. "Motores y agitadores. Hijos de políticos, empresarios... Tienen una línea política muy clara ".





por Resistencia 2.0 -

El Presidente de Bolivia, Evo Morales, recordó que un día como hoy en 1988 el ex presidente de Estados Unidos, Richard Nixon propuso a su país invadir Nicaragua.

Al recordar ese hecho de hace 30 años, el mantadario boliviano denunció la nueva agresión que el pueblo nicaragüense está sufriendo de parte de Estados Unidos.

“Ahora el pueblo nicaragüense está sufriendo una nueva agresión de EEUU, que en un afán golpista, está financiando grupos violentos y medios de comunicación”, denunció Evo a través de su cuenta de twitter.



por Resistencia 2.0 -

La revuelta golpista que está siendo dirigida por un pequeño grupo de opositores al Gobierno Sandinista, está valiéndose de métodos violentos y destrucción de la economía.

Desde que la violencia explotó en abril, más de 20 mil empleos en el sector de las mipymes se perdieron; esto sumado al cierre de más de 2 mil 500 micros, pequeñas y medianas empresas, ha hecho que en la economía se deje de movilizar unos 100 millones de dólares.

Leonado Torres, representante del sector privado en la Mesa de Diálogo Nacional, advirtió que este es solo el comienzo del descalabro económico, en el cual el sector turismo es uno de los más perjudicados.

El experto expuso que el país se enfrenta a un serio retroceso económico, de unos 20 o 30 años para ser cauteloso.  Asimismo, valoró que tanto daño a la economía con seguridad expondrá al país a un nuevo programa de ajuste con el Fondo Monetario Internacional.

“Nos habíamos adaptado a no contar con un programa de ajuste del Fondo Monetario Internacional por mucho tiempo… (Ellos) eran asesores de nosotros, venían a asesorarnos, pero ahora vamos a tener que revisar con el FMI algún plan de ajuste que nos ayude a estabilizar un poco”.

Recordó que las recomendaciones del Fondo son ejecutar reformas a la seguridad social (aumentar las cotizaciones a mil 500 semanas, ampliar la edad de jubilación a los 65 años, eliminar los programas del INSS) y reducir las exoneraciones y exenciones a las empresas privadas que significan unos mil millones de dólares al año.

“Va a ser una propuesta dura”, aseguró Torres.


por MANUEL ESPINOZA -

Tras el informe emitido por la CIDH en el Consejo Permanente de la OEA el viernes 22 de Junio del corriente, no cabe mayor duda que este organismo está al igual que en Venezuela, como parte de un plan desestabilizador.

Se entendió, que por su objetivo natural de promover y proteger los derechos humanos en L.A con insistencia solicitaba su llegada al país tras el inicio de la crisis nacional el 18 de abril del corriente. También se pudo creer que la insistencia de la llamada sociedad civil de que esta arribara al país era lógica. Sin embargo los resultados de sus observaciones preliminares, muchas de las medidas ya implementadas desde esa fecha hasta hoy así como su último informe, que según ellos tienen un carácter conclusivo están totalmente parcializados.

Por la premura de su primer visita, que apenas duro cinco días del 17 al 21 de mayo tras haber sido invitado por el gobierno y por la avalancha de denuncias en contra del gobierno se pudo entender que su informe preliminar presentado en su último día de visita estuviera inclinado a pronunciarse en contra del Estado y no en contra de los que tras bastidores han provocado tanta muerte y dolor en un país que en once años no había sufrido tal barbarie.

Algo que si fue claro para muchos, que la avalancha de denuncias provocadas por la derecha golpista fue bien dirigida por aquellos organismos de supuesta promoción de los derechos humanos pero de mala reputación en el país. Mientras tantos el Estado y los sandinistas apenas aprendían ese esquema de denunciar ante la CIDH las agresiones y muertes de la que fueron víctimas en el inicio del golpe. Significa que unos ya estaban preparados no solo para urgir la llegada de la CIDH, sino de actuar en tiempo y forma para inundarlos con las denuncias. Eso demuestra, que el Golpe fue un plan sorpresa para el gobierno.

Basta con el primer ejemplo de las miles de mentiras en este golpe, que expuso el canciller Moncada en su intervención al descalificar en su totalidad el informe del 22 de junio. Me refiero a “la noticia falsa de un estudiante muerto en la UCA, el cual nunca existió pero, que sirvió de detonante a los hechos ocurridos desde el 19 de abril” De ahí al revisar el texto, el contenido y la forma de ese primer informe preliminar es fácil pensar, que lo que mal inicia mal termina.


Sin embargo, hasta hace unos cuantos días que se presentara el informe final, se abrigaban por lo menos cinco esperanzas:

• Que el informe final, recogiera lo declarado por el Secretario de la OEA, Luis Almagro, quien denunció la intentona golpista al calificar a la elite de poder como mentirosos, finqueros acostumbrados a hacer con el pueblo de Nicaragua lo que les venga en gana y que su intención de golpe no iba a ser jamás avalado por esa organización.

• Las mismas declaraciones públicas emitidas por varios supuestos líderes de la revuelta en relación de que ya no se trataba de protestar en contra de las reformas del INSS, sino de la renuncia y rendición del Presidente y el desconocimiento de todo el gobierno.

• Que tras un mes de mayor recepción de denuncias de la otra parte de los nicaragüenses modificara su lógica de una sola vía de donde venía la violencia generalizada. Videos escalofriantes de torturas y asesinatos, declaraciones de falsos muertos, que se incluían en la lista de mártires por parte de la sociedad civil y los organismos locales como la CPDH, las declaraciones de los mismos padres, familiares y amigos sobre la información tergiversada mediáticamente y en la voz de los golpistas no sirvieron de mucho durante el mes que se dilataron en prepararlo dicho informe.

• La protesta emitida con anticipación del GRUN cuando la CIDH se la presento antes de su lectura pública.

• Sobre todo porque solo con verdad y justicia se lograría traer la paz y la estabilidad, que quieren todos los nicaragüenses y la CIDH misma ha iniciado con graso error. 

Apenas recoge a 5 policías muertos y 65 heridos, y juntos con estos en solo tres líneas de su informe aborda el tema de “represalias y hostigamientos a las que sectores sociales al gobierno y agentes estatales que ha sido objeto” Nada de las denuncias hechas por el Ministerio Publico de más de 60 personas asesinadas y destrucción de instalaciones públicas las que fueron remetidas fueron para nada incluidas. De ahí y más argumentos que presentaron en su informe final que la intervención del gobierno en la voz del Ministro Moncada sea clara en calificarlo de “subjetivo, sesgado, prejuiciado y notoriamente parcializado”.

La derecha golpista no en vano han aceptado en su totalidad el informe de la CIDH, pues no solo genera el repudio de la sociedad contra el gobierno, sino que le da credibilidad a su intentona de golpe de Estado. De ahí el dicho, que por la diáspora se saca el día.

Una nueva duda como nube negra se cierna sobre el prestigio y credibilidad de la CIDH en las labores que realizaran en el país a partir de hoy.

Ahora su capacidad imparcial, de investigación sobre cada caso desde el 19 de abril hasta hoy in loco y no desde su sede en Washington por medio del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) y la identificación de los verdaderos responsables se pondrá a prueba. Solo así podremos responder a la primera pregunta.

Por ahora y sin restarle responsabilidad a la CIDH por su viciado informe si se puede decir, que ha sido utilizada por los golpistas en su objetivo desestabilizador. El tiempo dirá ya más!